sábado, 19 de marzo de 2011
Justificante natural
Tener una cara bonita (o lo que la mayoría considera que es una cara bonita) nos da puntos, al igual que ser listos, o atléticos, o fuertes, o graciosos. Es decir, si soy guapo no importa que sea tonto, y soy extremadamente guapo no importa mi horrible físico, e inversamente, si soy muy inteligente se olvida mi fealdad, el ser humano es matemática pura. Hay que joderse ¿Alguna vez habéis tenido la sensación de que nadie os escucha? o de que, os escuchan pero no entienden una palabra, quizás el problema no sea el no encontrar ''ese punto'', no hablo del G, pero esto no es obvio, claridad y perfección pediré a Santa Claus. Pues yo no soy ni guapo ni inteligente, esto me destierra, lejos, que tristeza.
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